jueves, 11 de septiembre de 2025

Bombillas

Durante más de un siglo, la bombilla fue la reina indiscutible de la iluminación. Ese pequeño objeto de vidrio que transformaba la oscuridad en luz con solo un clic, iluminando hogares, calles y oficinas hasta bien entrada la noche. Símbolo de progreso, ingenio y también de esas facturas eléctricas que arruinaban el presupuesto mensual.

Pero hacia finales del siglo XXI, las bombillas comenzaron a perder su reinado. Primero llegaron los sistemas inteligentes de iluminación ambiental, que no solo alumbraban, sino que cambiaban de color, intensidad y hasta ritmo según el estado de ánimo. Después, la eficiencia energética y las políticas ecologistas impulsaron tecnologías más sostenibles, donde la luz no necesitaba un filamento ni un gas raro para brillar.

Finalmente, hacia 2080, la bombilla tradicional desapareció casi por completo. La gente prefería vivir en ambientes iluminados por proyecciones holográficas, luces naturales artificiales —recordemos que el último tercio del siglo XXI fue la época de lo natural artificialy fuentes de energía que ni siquiera requerían cables.