jueves, 14 de diciembre de 2017

Con las prisas

El bajel veneciano estaba a punto de zarpar. Con las prisas, había olvidado coger las llaves. Tendría que regresar para buscarlas. Se lo explicó a su mujer y le pidió que tuviera paciencia. Hugo de Vermandois había dejado olvidadas las llaves del cinturón de castidad en San Juan de Acre.