viernes, 26 de julio de 2019

Papelera

Juanjo Muñoz: “No érase ninguna vez, en ninguna parte, nada ni nadie… Esto no es un cuento. No pienses que lo has leído”.

El alcaide ha prohibido que los presos lean: no quiere que se evadan de la realidad.
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–¿Me amas?
–¿Amarte? Te odio.
–¿Me odias? Entonces muérdeme.
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El au pair me ha contado un cuento chino.
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Si vivir son dos días, ¿estoy yo ya muy avanzado en el segundo?
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Hubo un ambiente estable en el comedor. ¿Quién podía imaginar que en el dormitorio habría tormenta?
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–Estoy tan caliente…
–Pues a mí no te acerques, que yo estoy que ardo.
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SOBREPROTECCIÓN PARENTAL
Le llevaron al dentista para que le empastara los dientes de leche.
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–¿Qué tal, Laura?
–Fatal, Carmen. Una pesadilla.
–¿No te gusta?
–¿Gustarme? Es horrible. Voy a deshacerme de él.
–Dale otra oportunidad.
–¿Otra oportunidad? Tengo el sueño deshecho.
–¿Qué vas a hacer entonces?
–Hoy mismo descambio ese colchón.
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A Malthus le gustaba dispararles a las cigüeñas.
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¡¡Coge el boli!! ¡Demasiado tarde! ¡La idea ya se ha ido! ¡Se te ha vuelto a escapar!
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Él tenía setenta y un años; ella, veinte. Se conocieron por causalidad: él la encontró abandonada en la calle. Eran felices juntos, aunque no tuvieran mucho en común: a Manuel le gustaban las bananas; a Naxia 3.2 le chiflaban los tornillos.
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El australopiteco que talló la primera piedra no pasó a la historia.
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CONTRAFACTUAL
Nicias conquista Siracusa. Alcibíades se muerde los puños.
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La sorpresa inicial dio paso a la alegría. Sin embargo, de pronto le vino a la cabeza que la vida de un rey estaba llena de mentiras, intrigas, traiciones, guerras, asesinatos, adulterios. Antes de que nadie le viera, Arturo volvió a introducir la espada en la piedra.
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Ante la ley hay un guardián. Un campesino se presenta frente a este guardián y solicita que le permita entrar. El guardián le dice:
–Vuelva usted mañana.
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Lack of photogenic killed the cat.
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–Asia a un lado, al otro…
–¡Cuidado, dominguero!
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Cuando el guardia de seguridad lo vio sentado en la silla de exhibición, le gritó que se quitara de allí. Como no hizo caso, expulsó al maniquí de la tienda.
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Volodímir Zelenski es un presidente de método.
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Son, this morass will be yours.
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Un viento extraño acabó con las fronteras un martes. Desaparecieron Julane, Morted y Chambror. Fue cosa de los nuevos dioses, sin duda. Los sacerdotes de las viejas divinidades se ofrecieron para arreglar el desafuero. Fueron creados seis nuevos países: Gosnio, Mortu, Bogral, Nidif, Hulite y Pabuquia.
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Anne Oise ofreció 800 francos, pero Marie des Lèvres pagó 1.000. Ahora era dueña de su siniestro pensamiento. Cuando fuera ejecutado, las autoridades le entregarían el cerebro de Henri Désiré Landru, el hombre que había matado a su hermana. Lo arrojaría a los perros.
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Un viento extraño acabó con las fronteras un martes. Movió dunas, barrió oasis, convirtió erg en reg y reg en erg. Los nómadas, que habían pasado el temporal dentro de sus tiendas, sintieron que se habían desplazado miles de millas.
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Ante la puerta del juzgado español, el campesino se encuentra al guardián, que le dice:
–Vuelva usted mañana.
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Siempre que se emborrachaba, Alejandro conquistaba toda Asia.
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Asia a un lado, al otro… ¡Cuidado, que…!
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Sila estaba arruinado. Condujo su ejército a Asia.
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Un viento extraño acabó con las fronteras un martes. El topógrafo está desesperado. Ahora no sabe dónde empieza el Chad y dónde acaba Libia. Y, esa montaña de arena, ¿está en Níger o en Argelia?
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Un viento extraño acabó con las fronteras un martes. Los agrimensores, enfadados, denunciaron a Eolo.
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Y Dios, para contradecir a Einstein, jugó a los dados.
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LA JUVENTUD Y LOS MONSTRUOS
A la luz de la fogata contaban historias de cómo habían derrotado a los monstruos. ¡Qué jóvenes eran entonces! ¡Y qué emocionante era su vida! ¡Cuánto los echan de menos!
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Un viento extraño acabó con las fronteras un martes. El agrimensor K., que había terminado el lunes de delimitarlas, estaba harto de que le pasaran esas absurdas desgracias. Se dio por vencido: aceptaría el fácil trabajo que le habían ofrecido en el castillo.
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BODAS DE CANÁ
Con su primer milagro, Jesús se ganó a los borrachos.
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Cuando al detective se le acabaron todas las pistas, fue a la pista de patinaje.
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Dios cuenta las verdades que parecen mentiras. El diablo cuenta las mentiras que parecen verdades.
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PRETÉRITO MÁS QUE PERFECTO
Laura se había acostado con su monitor de natación.
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El marqués de Sade tortura a sus lectores aplazando la publicación de su nuevo libro.
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Le soltó un bofetón a su hijo y le dijo:
–Serás funcionario, como yo.
No tuvo la voluntad de resistirse a su padre. Entró en el Cuerpo de Aduaneros, se casó, tuvo hijos y, cuando se retiró a los 65 años, Adolf Hitler pudo dedicarse por fin a su gran afición: la pintura.
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Narciso no entendía por qué sólo se podía retuitear a sí mismo una vez.
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La RAE informa de que este agosto abrirá un paréntesis.
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CONTRAFACTUAL
Me gusta la historia contrafactual, por ejemplo, ésta: soy un escritor de novelas románticas y firmo con el seudónimo de Patricia Roomer. Tengo un ático en Miami y un apartamento en Nueva York.
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Imputaron al dramaturgo por matar de aburrimiento a cinco espectadores.
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El escritor le demostró a la crítica literaria que sabía usar la lengua.
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Lucille es muy posesiva; es su naturaleza o, dicho de otro modo, forma parte de su hardware. Desde luego, sé que me perdonaría mi aventurilla, pero que nunca la olvidaría. Así que hice lo mejor: la reseteé.
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–Las ratas abandonan el barco.
–¿Y no se ahogan?
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CAPERUCITA CARIBEÑA
Lobo Vásquez se la comió a la abuela y, luego, a la nieta.
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Los espectadores que esperaron la escena después los títulos de crédito murieron del susto.
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No paró de trabajar durante todo el verano recogiendo comida. Cuando llegó el invierno, continuó el trabajo, fortaleciendo o ampliando los túneles, limpiando. Siempre había algo que hacer. Estaba harta. Envidiaba a la cigarra. Esa sí que había disfrutado de la vida.
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Al séptimo día, le dijo a su hijo:
–Toma, un terrario. Verás que animales más pequeños tiene. Cuídamelo.
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Cuando encontraron la puerta a la subciudad, se sintieron aliviados: todos se despertaron de su pesadilla. Se dirigieron a sus cubículos, se acostaron en sus lechos y comenzaron la larga hibernación.
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–¡Borra esa sonrisa de la cara!
–Ya quisiera yo, pero con el bótox no puedo.
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Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de pensar que Gabriel García Márquez y él empezaron mal.
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Kong le dijo a Ann Darrow que dejara de gritar. Sólo la quería para que le despiojase.
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–¿Lo harás?
–Lo haré.
–¿Por cuánto?
–No me importa el dinero. Haré el papel de malo. Sólo pido una cosa.
–¿Qué? ¿Quieres más diálogo? ¿Tienes reparos en aparecer desnudo? Dime.
–Todo eso me da igual. Sólo quiero morir de una manera espectacular, inolvidable.
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Le dijo que había soñado que era una mariposa. El psicoanalista pensó que ahora sí podría comprarse una moto.
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MEMORIA DE MIS PUTAS TRISTES
El escritor octogenario quiso tener un último momento de lascivia con una reina del papel cuché.
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¿Y si Stalin, aunque no tuviera razones, tuviera razón?
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Tengo ganas, querido, de regresar a nuestro hogar, besarte, acostarme a tu lado, cubrirte de caricias, entrelazar tus manos con las mías, sentir que todo vuelve a ser como antes. Bueno, no todo. Ojalá pudiera también regresarte a la vida.
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Decidió acabar con todo arrojándose por la ventana, pero la botella de tequila le convenció para que no lo hiciera.
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En la superficie, soportaron traiciones, lucharon contra criaturas mutantes, temieron constantemente quedarse sin aire. Cuando encontraron la puerta a la subciudad, se sintieron aliviados: todos se despertaron de su pesadilla. Se acostaron en sus lechos y comenzaron la larga hibernación.
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El sexto día por la tarde, poco después de crear a Adán, Dios sintió que había olvidado algo. Pero ¿qué? De pronto cayó en la cuenta. ¡Menudo despiste!
–Hágase la luz –dijo.
Y la luz se hizo.
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La sonrisa de la Gioconda es forzada: se hartó de Leonardo en el enésimo posado.
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Cuando murió el doctor Freud, todos despertaron de su pesadilla.
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Cuando el psicoanalista de la colonia espacial fue asesinado, todos despertaron de su pesadilla.
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Se peleó con Laura porque, a pesar de que eran amigas íntimas, no le contó nada de su enfermedad. Dejó de hablarse con Mónica, que no le felicitó cuando consiguió aprobar las oposiciones. Rompió con David. Perdió contacto con Sonia, que por trabajo se mudó a Santander. La verdad, nunca le había caído bien Rosana. Se peleó con María por algo que ahora no recordaba. Desde luego, había ido borrando todas sus fotos. Ahora, cuando pasa las hojas del álbum, sólo aparece ella.
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Miente tan bien que se engaña a sí mismo.
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¡Qué tramposo! Siempre que voy a darle jaque mate, el monitor se pone amarillo. El ordenador no se toma nada bien perder al ajedrez.
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JUAN 4, 7-9
–Mujer, ¿puedes sacarme agua del pozo?
–¿Tú es que eres manco?
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Hace setenta años dieron su vida por un país cuyos actuales habitantes no están dispuestos a dar una uña para salvar.
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Yu-yeong y Won-sang creían que habían dejado atrás a los cazadores. Hasta el final no comprendieron que los batidores les habían conducido hábilmente a la trampa.
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Teseo, que era animalista, nunca salió del laberinto.
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Acabar con los humanos les tomó a los alienígenas poco más de dos días terrestres. Limpiar la Tierra de fantasmas, espíritus y ectoplasmas les llevó, sin embargo, varios eones.
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I was banned. I bananed them.
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He tratado de ponerme los zapatos de mi mujer. Me duelen los pies.
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Ha decidido hacerse tan fea como su marido.
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NUDO GORDIANO
–Alejandro ha hecho trampa.
–¿Y se lo dirás tú?
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Sus pestañas no me dejaron ver ni la curva, ni el seto, ni el árbol, ni nada.
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Cuando el guardia de seguridad vio al maniquí sentado en la silla de exhibición, lo expulsó de la tienda.
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Me enfrenté a la hoja en blanco. Me venció.
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Es noche profunda. Ghumh abandona su nicho: tiene que alimentarse. Mientras que camina bajo la luz de la Luna, no puede dejar de sentir escalofríos: siente que los cazadores de monstruos le acechan.
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¿Sodoma y Gomorra nos muestran cómo será el juicio final?
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Ella me pegó. Yo la até. Ella me mordió. Yo la amordacé e hice algo que, sabía, le dolería: llamé a mi madre para preguntarle si quería que bajáramos el domingo a comer.
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Las negras ganaron, pero en el tablero sólo quedaban el rey y dos torres: no había nada que celebrar.
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–Entra. Al otro lado hay un mundo increíble.
–No, estoy harta de armarios mágicos, de reinas perversas, de brujas malvadas y de criaturas que no tienen los redaños para salvarse a sí mismas. Hoy quiero estar relajada: me voy a quedar en la piscina.
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SUICIDA
Se negó a que le hicieran el boca a boca.
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El ahogado tenía una nota escrita en el pecho con rotulador indeleble: Sólo autorizo a hacerme el boca a boca a Pamela Anderson.
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Echaba algo de menos en el cielo: una ventana para contemplar el Infierno.
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Doctor Schrödinger healed the nomophobic cat.
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Cuando el hijo de Darwin se puso los guantes encima de la cabeza durante el funeral de su padre, muchos terminaron por convencerse de que el hombre desciende del mono.
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CONTRAFACTUAL
Teseo murió en el laberinto. Los corintios derrotaron a los persas en las Guerras Médicas, pero perdieron la Guerra del Peloponeso. Sócrates y Platón fueron pastores de cabras en las colinas del Ática.
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En el Infierno había una ventana para contemplar el Cielo. Formaba parte del castigo. Era falsa.
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–Salgo con Asia Argento.
–Te gusta vivir peligrosamente.
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–¿Cómo has podido contar eso de mí?
–Piénsalo, Pasífae: soy el rey. Ahora, simplemente, me tienen lástima, pero se habrían burlado de mí si supieran que me follé a una vaca.
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Nadie se baña dos veces en el mismo río contaminado.
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El ocho tropezó y cayó: sintió que se volvía infinito.
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Drácula se llevó un chasco cuando le llegó el televisor de plasma que había comprado en Amazon. Esperaba otra cosa.
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Perdió una fortuna en las cartas. La ruleta no le fue mejor: si apostaba al rojo, salía el negro. Sus últimas monedas las gastó en el jackpot: no tuvo suerte. Salió de Baden-Baden sólo con la ropa, arruinado. Dostoievski debía ahora escribir otra obra maestra.
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–Por donde pisa mi caballo, no vuelve a nacer la hierba.
–Entonces, Atila, ¿qué come?
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Después de un sueño intranquilo, decidió que de ese día no pasaría: le diría a sus padres que quería ser llamado Gregoria.
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La nueva amante del marqués de Sade es una masoquista. Él disfruta acariciándola.
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CONTRAFACTUAL
Los espartanos decidieron apoyar a Alejandro, que conquistó la India.
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¿Cómo que no puedo pasar? Usted puede ser el guardián de la ley, pero yo conozco al primo del diputado.
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–Acusado Nóvikov, ¿se declara culpable de espionaje?
–Ya se lo dije a Yuri, mi interrogador: estoy dispuesto a declararme culpable, pero no admito los términos de la acusación.
–Explíquese, acusado Nóvikov.
–Es un insulto que me acusen de ser un espía de los servicios secretos de Ruritania. ¿Qué les cuesta acusarme de ser un espía al servicio de Borduria?
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Generalmente, los niños vienen de París, pero Christian vino de un fin de semana en Almuñécar.
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MP-57A era todo un triunfo de la tecnología soviética. Era el primer autómata fabricado para cumplir funciones de burócrata. Gracias a él, se acabó implantando en la URSS el socialismo con rostro humano.
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Las manecillas del reloj nunca se movían; siempre estaban paradas un poco antes de las doce. Decían que era el reloj del apocalipsis, pero la señora Okakura no sabía lo que eso significaba. Un día, a medianoche, probó a ponerlo en hora. Movió la aguja grande y
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–¿Qué vas a leer este verano, a Yuval Harari, a Juan Gómez-Jurado, a Kate Morton, a Jojo Moyes?
–Leeré a Julio Verne. Tengo morriña.
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El concierto ha sido un éxito: la Jeanne d’Arc de Moscheles, el Concierto para violín de Mendelssohn, la Sinfonía Titán de Mahler. El público de Tel Aviv aplaude enfervorizado. El director anuncia un bis: la Muerte de Sigfrido, de Wagner. La multitud ruge furiosa.
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Me invitó a tomar un café sobre el césped. Yo preferiría en su casa.
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Nosotros volvemos a ser tú y yo.
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CONTRAFACTUAL
El centurión Opimio no pudo desviar la lanza que mató a César. Pompeyo y sus descendientes gobernaron el Imperio romano durante un siglo y medio.
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Ser Stalin no fue fácil.
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La mató una bala perdida mientras veía Rambo 5.
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La Legión Cóndor pasa.
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Me he tatuado tu nombre en mi hombro. Si no quieres volver a quedar conmigo, me pagarás al menos el tratamiento, ¿no?
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Cuando sus nietos le hicieron notar que sólo aparecía por las noches y que nunca comía ni iba al baño, les dijo que eso no quería decir nada. Pero cuando le preguntaron que por qué ya no leía, don Pablo Guillermo empezó a pensar que sí, que tal vez, que quizá era un fantasma.
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La tripulación descubrió que Colón no sabía navegar.
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Ha descubierto que, si alguien sale del baño sin secarse y corre desnudo por la calle, puede resfriarse. ¡Eureka!
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Damned shiteater! Don’t eat my shit!
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La catadora de Hitler encontraba su dieta venenosa.
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REFLEXIVO
Deja de joderte.
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Como bien demuestra La narración de Arthur Gordon Pym, Poe sentía pánico a la hoja en blanco.
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El ateo se negó a dar el santo y seña.
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Luna está cabreada: Neil y Buzz lo han dejado todo lleno de pisadas.
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EL COLMO
El informático se ha enamorado del algoritmo de Tinder.